La novela más famosa de la literatura castellana desde su publicación inicial en 1605 es "El ingenioso hidalgo Don Quijote de La Mancha", pero no sólo eso sino que también se trata del libro más editado y traducido de la historia, después de La Sagrada Biblia, claro. Algunos de estos detalles más el ambiente del siglo XVI pueden apreciarse visitando la casa natal de su autor, Miguel de Cervantes Saavedra, en Álcalá de Henares. El caso es que uno de los capítulos mejor recordados por todo el mundo es cuando Don Quijote se enfrenta a los molinos de viento pensando que eran gigantes. Estas bonitas construcciones se han utilizado durante siglos en La Mancha para obtener harina, son una maravilla de la arquitectura rural, hoy en día restauradas y convertidas en atractivo turístico. Estos molinos se integraban en el paisaje y en su entorno sin apenas causar problemas medioambientales, todo lo contrario de lo que ocurre en la actualidad con los nuevos molinos de viento; los aerogeneradores que han invadido España de gigantes contra los que ni siquiera el hidalgo Don Quijote osaría enfrentarse dadas las monstruosas dimensiones de estos engendros tan dañinos para el medio ambiente.Excursión e inesperado encuentro
El pasado fin de semana, mientras andabamos de excursión por Mota del Cuervo, provincia de Cuenca, visitando las lagunas hipersalinas de Manjavacas (Mancha húmeda), en las que pasaban los últimos días del invierno flamencos, avocetas, patos cuchara, etc. y los molinos de viento del mismo municipio, se nos acercó con el mayor atrevimiento del mundo un pinzón cebra, Taeniopygia guttata, cantando como si fuese un pequeño personaje de novela que nos quisiese contar algún secreto, seguramente querría decirnos que no eran gigantes, sino molinos.

También se conoce como diamante mandarín, aunque no se trate de una ave procedente de China, sino de Australia e Indonesia. Buscando datos sobre esta especie exótica, la wikipedia comenta que están introducidos en Estados Unidos y Portugal, que como quien dice está aquí al lado. Este pajarillo se adapta bien a terrenos áridos en donde se alimenta de semillas y brotes. Al ser tan sociable se ha convertido en una de las aves de jaula favoritas con lo cual es prácticamente inevitable que se vayan escapando algunos ejemplares que se asilvestran e integran gradualmente en los ecosistemas locales. Como puede verse en la foto se trata de una variedad doméstica ya que la coloración que presenta no es la original de estos pinzones, este es blanco, gris y con lágrima gris también. Lo habitual es encontrarse con otras variedades como han publicado otros naturalistas. Como pasa con tantas especies introducidas artificialmente, poco a poco irán adaptándose aunque mayormente acaben siendo merienda para los depredadores locales que merodean en las afueras de pueblos y ciudades: cernícalos, aguilillas calzadas, etc.
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