La Ciencia no suele dar mucho pie a opiniones, pero de vez en cuando toca redactar un artículo de opinión. Este se debe a que por fin, el Ministerio de Ciencia e Innovación ha tenido a bien sustituir a Mariano Barbacid, por mediación del patronato del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), después de hacerle perder el tiempo durante años en intrigas palaciegas.
En este blog comentamos hace poco más de un mes la lamentable situación a la que había abocado el Gobierno al hasta hoy director del CNIO, Mariano Barbacid. Esperemos que el Ministerio rectifique y se desdiga de las bochornosas declaraciones en las que acusaron a Barbacid de falta de ética. Ahora quieren llevar las palabras de Barbacid ante el patronato del CNIO, bajo la acusación de ir "más allá de los límites de la deontología profesional". Es totalmente injusto castigar a Mariano Barbacid por ejercer su libertad de expresión para denunciar y tratar de acabar con una situación enquistada y caracterizada por una serie de atropellos incomprensibles. Una vez que le hicieron imposible su labor, este prestigioso científico no tuvo otra salida que la dimisión que presentó en septiembre del año 2009 y que no se ha resuelto hasta hoy.
Ya sabemos que una de las características más frecuentes de los departamentos de investigación son las riñas, las peleas eternas, los favores personales, las desconfianzas, los favores políticos, las envidias, etc., pero esas miserias de la Ciencia no justifican que una vez que un científico tira la toalla para dedicarse sólo a investigar, desde el Ministerio le sigan haciendo la puñeta. La única explicación para todo esto siga va en el camino de las envidias e inaceptables deseos de venganza.
Viendo el resultado final de esta bronca de años está claro que Cristina Garmendia finalmente ha promocionado a gente de su cuerda, ojeando los curricula, algo que llama la atención de la sustituta elegida, María Antonia Blasco, aparte de que nació en 1965 y Mariano Barbacid en 1949, ambas vienen de la órbita de Margarita Salas (la famosa sobrina de Severo Ochoa) que dirigió la tesis de la ministra en 1989 y supervisó la de la nueva directora del CNIO en 1993 ¿ qué coincidencia, verdad ? esperemos que al menos se comporten con altura de miras (ahora que se han salido con la suya) y que tras este bochornoso espectáculo de casi dos años pare la persecución a la que han sometido al que sin ningún lugar a dudas es nuestro mejor investigador en activo.
En relación con esto, en el departamento en el que ahora trabajo, y por motivos que no vienen a cuento, se han puesto a comprobar el curriculum del personal y ¡sorpresa! algunos no han terminado la carrera, otros no tienen el título homologado, etc. Y me pregunto, ¿ acaso en nuestro país estas cosas no pasan a todos los niveles ? porque el curriculum de la nueva directora del CNIO no parece el más adecuado para dirigir el que hasta ahora era considerado el mejor centro europeo de investigación sobre el cáncer. En definitiva, otro turbio asunto para mayor descrédito de nuestra Ciencia.
Un saludo
Aquí en este asunto de Barbacid, hay algo raro que me huele. Me da la impresión de que el que sea un buen científico en su especialidad, no le exime de que se ha pasado de listo al intentar montar ese pastiche con una fundación, cuando lo de las fundaciones es sabido que son organismos que sirven entre otras cosas para no dar explicaciones de sus cuentas. Espero equivocarme.
ResponderEliminarHola juan jose
ResponderEliminarNo creo que lo que intento hacer tuviese ninguna finalidad sospechosa. De hecho dimitio en 2009 y este asunto que comentas es del mes pasado. Me inclino mas por las tipicas trifulcas entre investigadores, y a mi lo que me preocupa es en este caso los que ham ganado obviamente son cientificos de peor calidad, y eso solo puede perjudicar el nivel general del cnio.
Un saludo y gracias por tu comentario
Esta noticia rezuma machismo y mucha ignorancia.
ResponderEliminarHola
ResponderEliminarNo es una noticia, se trata de un artículo de opinión. De todos modos entiendo que para los que trabajais en el CNIO (como es tu caso) al estar implicados con uno de los bandos no es agradable oir opiniones discordantes, sobre todo si estais de acuerdo con el nuevo rumbo que está tomando la institución. Los que vemos el asunto desde fuera vamos sacamos nuestras conclusiones de esta trifulca. De todos modos me gustaría que argumentases algo más porque con sólo calificar el artículo de machista e ignorante no tengo ningún motivo para cambiar de opinión, más bien me debo reafirmar en lo contrario porque si desde el CNIO alguien me escribe para descalificar la entrada con argumentos tan poco razonados es que la "guerra" que teneis ahí dentro debe ser de mucho cuidado.
Un saludo